Abrió el adagio latino con Peter Alfonso y tuvo poca suerte con su performance. En cambio, Cinthia Fernández y Adabel Guerrero, elogiadas. Mirá el video.
Después de la intensa gala vivida en la noche del lunes, marcada por la sorpresiva partida de Fabio la Mole Moli, la velada del martes dio inicio a un nuevo ritmo en el Bailando 2011. El ritmo del adagio internacional ya había pisado pistas de Ideas del Sur durante la tercera ronda del certamen y esta vez llegó ahora en manos de su versión latina.
Abriendo la gala, Peter Alfonso confesó que la compulsa telefónica de la noche anterior le había puesto los pelos de punta: "Sufrí más que en la final del año pasado", aseguró el productor. Después se lanzó a la pista con un adagio extra romántico, pero poco provechoso a la hora de la devolución del jurado.
Flavio Mendoza dijo que no le gustó "nada" lo de Alfonso, mientras que Polino señaló que Peter sobreactúa: "Lo vi demasiado forzado. Los trucos estuvieron sucios y no vi conexión con su compañera", sentenció. "Está bien, salió feo, es verdad", reconoció el novio de Cháves y se llevó apenas 23 puntos.
El show de Cinthia
En segundo lugar llegó Cinthia Fernández y le pidió a Tinelli que le hiciera "cococho" por la pista. Por supuesto, la chica del hilo dental aprovechó todas las poses para mostrar su ergonomía completa y Marcelo terminó en cuatros patas haciendo de "caballito".
La vedette también blanqueó su reciente relación con Jonathan Ferrari, jugador de San Lorenzo. "No sé qué le ve a ese pibe", bromeó el conductor. En el baile, Cinthia fue elogiada por el jurado y cosechó 31 unidades.
Cerrando la noche, Adabel Guerrero y su partenaire arribaron disfrazados de monjes y desparramando incienso por todo el estudio. "Vengo a traer paz y a sacar la mala onda", aseguró Guerrero, consustanciada con su muy criticada búsqueda espiritual. "¡Qué feo olor!", se quejó Marcelo, poco amigo del incienso.
La performance de la vedette recibió elogios y 31 puntos en total. Sin embargo, Moria Casán y Polino criticaron la actuación "espiritual" de Adabel: "Me dormí", tiró Casán, mientras que Polino directamente fue por sus capacidades histriónicas: "Sos muy mala en la actuación. Das pena. Fue horrible", sentenció el chimentero.
Abriendo la gala, Peter Alfonso confesó que la compulsa telefónica de la noche anterior le había puesto los pelos de punta: "Sufrí más que en la final del año pasado", aseguró el productor. Después se lanzó a la pista con un adagio extra romántico, pero poco provechoso a la hora de la devolución del jurado.
Flavio Mendoza dijo que no le gustó "nada" lo de Alfonso, mientras que Polino señaló que Peter sobreactúa: "Lo vi demasiado forzado. Los trucos estuvieron sucios y no vi conexión con su compañera", sentenció. "Está bien, salió feo, es verdad", reconoció el novio de Cháves y se llevó apenas 23 puntos.
El show de Cinthia
En segundo lugar llegó Cinthia Fernández y le pidió a Tinelli que le hiciera "cococho" por la pista. Por supuesto, la chica del hilo dental aprovechó todas las poses para mostrar su ergonomía completa y Marcelo terminó en cuatros patas haciendo de "caballito".
La vedette también blanqueó su reciente relación con Jonathan Ferrari, jugador de San Lorenzo. "No sé qué le ve a ese pibe", bromeó el conductor. En el baile, Cinthia fue elogiada por el jurado y cosechó 31 unidades.
Cerrando la noche, Adabel Guerrero y su partenaire arribaron disfrazados de monjes y desparramando incienso por todo el estudio. "Vengo a traer paz y a sacar la mala onda", aseguró Guerrero, consustanciada con su muy criticada búsqueda espiritual. "¡Qué feo olor!", se quejó Marcelo, poco amigo del incienso.
La performance de la vedette recibió elogios y 31 puntos en total. Sin embargo, Moria Casán y Polino criticaron la actuación "espiritual" de Adabel: "Me dormí", tiró Casán, mientras que Polino directamente fue por sus capacidades histriónicas: "Sos muy mala en la actuación. Das pena. Fue horrible", sentenció el chimentero.
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